7 Errores de limpieza que podrias estar cometiendo (¡y como solucionarlos!)
Todos queremos que nuestras casas brillen y resplandezcan, pero a veces nuestros esfuerzos de limpieza o atajos pueden dificultar la tarea o llevar más tiempo a largo plazo. Aquí tienes siete errores comunes de limpieza y algunos consejos para ayudarte a limpiar como un profesional.
1. Usar Demasiado Limpiador
El Error: Más limpiador significa una superficie más limpia, ¿verdad? ¡Para nada! Usar demasiado puede dejar un residuo pegajoso que atrae más suciedad y mugre.
La Solución: Con un poco es suficiente. Sigue las instrucciones de tu limpiador y usa solo la cantidad recomendada. Si estás tratando con una mancha difícil, deja que el limpiador actúe durante unos minutos antes de limpiarlo.
2. Ignorar las Instrucciones
El Error: Saltarse las instrucciones y hacerlo a tu manera.
La Solución: Siempre lee las instrucciones de tus productos de limpieza. ¡Están ahí por una razón! Ya sea la cantidad a usar o el tipo de superficie para la que es seguro, esas instrucciones te ayudarán a obtener los mejores resultados.
3. Usar un Solo Paño para Limpiar
El Error: Limpiar toda tu casa con el mismo paño o esponja.
La Solución: Usa paños o esponjas diferentes para distintas áreas para evitar la contaminación cruzada. Colorear tus paños de limpieza puede hacer esto muy fácil: un color para el baño, otro para la cocina, y así sucesivamente. ¡Y no olvides lavarlos regularmente!
4. Olvidar Limpiar Tus Herramientas de Limpieza
El Error: Descuidar las herramientas que hacen todo el trabajo sucio.
La Solución: Limpia regularmente el filtro de tu aspiradora, los cabezales del trapeador y los cepillos. Un rápido enjuague con agua caliente y jabón para platos o un paso por la lavadora puede hacer maravillas. La mayoría de las herramientas de cocina como esponjas, paños suecos y cepillos para fregar pueden ir en la rejilla superior del lavavajillas para desinfección. ¡Herramientas limpias significan superficies más limpias!
5. Mezclar Productos de Limpieza
El Error: Mezclar diferentes productos de limpieza con la esperanza de obtener un limpiador más potente.
La Solución: Evita mezclar limpiadores, especialmente aquellos que contienen blanqueador o amoníaco. Pueden producir vapores nocivos. Usa un solo limpiador por tarea o un limpiador multiusos diseñado para diversas superficies. ¡Puedes encontrar mis limpiadores favoritos no tóxicos y multiusos en la tienda!
6. Limpiar el Polvo al Final
El Error: Limpiar el polvo después de haber limpiado otras superficies.
La Solución: Limpia el polvo primero. El polvo cae, así que empezar con esto asegura que no lo esparzas sobre tus suelos y muebles recién limpiados. Por eso limpiamos el polvo los martes para el Día de Polvo y aspiramos y lavamos los suelos los miércoles y jueves: ¡el orden importa! Usa un paño de microfibra apenas húmedo para atrapar el polvo en lugar de solo moverlo.
7. Pasar por Alto las Áreas de Alto Contacto
El Error: Olvidar limpiar lugares como interruptores de luz, manijas de puertas y controles remotos.
La Solución: Haz el hábito de limpiar estas áreas de alto contacto regularmente. Son puntos críticos para gérmenes y suciedad. Un rápido fregado con un poco de alcohol isopropílico en un paño de limpieza los mantendrá limpios y libres de gérmenes. Esta es una Tarea Rotativa en la Rutina de Clean Mama.
Ahí lo tienes: siete ajustes simples en tu rutina de limpieza que pueden marcar una gran diferencia. Recuerda, limpiar no tiene que ser una tarea aburrida—hagámoslo divertido y efectivo. ¡Feliz limpieza!